¿No encuentras las llaves? ¿Vas a por algo y no recuerdas el qué?

Todo el mundo olvida cosas ocasionalmente. Sin embargo, la pérdida de memoria no es algo que tomarse a la ligera.

Aunque no existen garantías cuando se trata de prevenir la pérdida de memoria o la demencia, ciertas actividades pueden ser beneficiosas.

Os dejamos aquí 7 consejos para que ayudes a tu memoria.

 

  1. Permanece activo mentalmente

Al igual que la actividad física ayuda a mantener tu cuerpo en forma, las actividades que estimulan la mente ayudan a mantener el cerebro en forma, — y pueden mantener la pérdida de memoria a raya. Haz las palabras cruzadas. Busca rutas alternativas al conducir. Aprende a tocar un instrumento musical, un nuevo idioma…

  1. Haz actividades sociales con regularidad

La interacción social ayuda a prevenir la depresión y el estrés, dos de las circunstancias que pueden contribuir a la pérdida de memoria. Busca oportunidades para estar con tus seres queridos, especialmente si vives solo.

  1. Organízate

Es más probable que olvides cosas si tu casa está desordenada.

Apunta las citas y tareas pendientes en una lista, en un calendario o en una agenda.

  1. Duerme bien

El sueño tiene un papel importante en ayudarte a consolidar los recuerdos, para que puedas pensar en ellos más adelante. Haz que sea una prioridad el dormir bien. La mayoría de los adultos necesitan entre siete y ocho horas de sueño al día.

  1. Adopta una dieta saludable

Una dieta saludable puede ser tan buena para tu cerebro como para tu corazón. Come frutas, verduras y cereales integrales. Escoge fuentes de proteína bajas en grasa, como el pescado, la carne magra y las aves sin piel. Lo que bebes también cuenta. No beber suficiente agua o beber demasiado alcohol puede llevar a la confusión y la pérdida de memoria.

  1. Incluye actividad física en tu rutina

La actividad física aumenta la presión sanguínea en todo el cuerpo, incluyendo el cerebro. Esto puede ayudar a mantener tu memoria en forma.

  1. Controla las enfermedades crónicas

Sigue tu tratamiento para enfermedades crónicas, como depresión, presión alta, colesterol alto, diabetes, y problemas de riñón o tiroides. Mientras mejor te cuides, mejor estará tu memoria. Además, revisa la medicación con tu médico de forma periódica. Varios medicamentos pueden tener un impacto en la memoria.

 

¡Cuídate y cuida tu memoria!